LOS ANUNCIOS QUE ENCENDIERON LAS ALARMAS

 EDITORIAL

Lo que faltan son inversiones y todo lo que eso significa


Por Walter R. Quinteros

Ya se sabía que este gobierno iba a recibir un país atrasado, endeudado, pobre y acostumbrado a décadas de populismo, corrupción y falto de inversiones.

Ya se sabía eso, nos moldearon tal cual como dice Mario Venuti en un posteo por Facebook, "Necesitamos saber cuál es el límite al dar porque el otro no reconoce el límite a la hora de recibir". Y hablo de planes para tirar manteca al techo por gobiernos populistas que nos moldearon de una u otra manera convirtiéndonos en un país decadente. Pero esta decadencia no es de ayer o de antes de ayer. Tampoco es de dos o tres culpables, es de millones de argentinos a lo largo de estos años. 

Los anuncios de posibles cortes en el servicio eléctrico, para usuarios industriales, en algunos días del verano con picos de calor, encendieron las alarmas entre la población en general. 

Porque por más que nos digan que están descartadas las interrupciones programadas entre los domicilios particulares, aquí quedó en evidencia que como país tenemos varias debilidades en el sistema energético que podrían repetirse en años posteriores si no se toman los recaudos necesarios. Por eso estamos tristes. Algo que pueda llegar a funcionar, una fuente de trabajo llámese Pyme, que retoma su actividad por falta de inversiones la vamos a tener que parar. O cambiarle el horario de trabajo.

La Secretaría de Energía dio a conocer los primeros lineamientos del plan de contingencia destinado a evitar los apagones generalizados. Dicen que controlarán la demanda de los grandes usuarios industriales, pero esto ya se viene haciendo hace varios años. 

Seguimos dando vueltas en la misma calesita.

Esta falta de inversión, dificulta cualquier posibilidad de implementar un plan. El primer llamado de alerta resulta que se espera para este verano, porque según las previsiones meteorológicas, habrá altas temperaturas que podrían superar el promedio de los últimos años, y así se proyectaría la probabilidad de un pico de demanda del orden de los 30.700 Mw de potencia, superando el récord de 29.653 Mw del 1° de febrero de este año.

El problema pasa por la falta de inversión. 

¿Será que hay falencias que dificultan la llegada de inversiones? Un sitio especializado como iProfesional señala que según la legislación vigente "las transportadoras operan y mantienen el servicio, pero no les corresponde hacer la expansión", una tarea para la que quedarían dos protagonistas: un Estado que, según lo expresado por el propio Gobierno, se retira de la obra pública o bien "alguna organización empresarial que esté en el negocio de la energía, pero para eso hace falta una ley". ¿Una Ley?

El panorama es complejocuando hablamos de leyes, y eso pasa porque los políticos no están enterados de todo ni de algo de todo ese todo. La mayoría van a ocupar bancas porque dicen que son personas que egresaron de la escuelita de buenas personas, y porque integraron una lista sábana que hubo que votar y, que tienen poco y nada para argumentar y que solo levantan la mano por levantarla, nomás. No nos hace bien. Hemos fallado todos como sociedad, y pienso que no estaría mal que nos pusiésemos a pensar cómo y por qué estamos acá, abajo, en el fondo del pozo, pensando a quién hemos elegido y por qué. 

Ninguno de nuestros representantes ha pensado el país. Y me alcanza con decirles que a los candidatos libertarios por Córdoba —por ejemplo—, les supe preguntar si sabían cuántos ríos alimentaban el dique Cruz del Eje, y cómo se llamaban esos ríos. Nada. Y si le preguntaba a los otros de los otros partidos casi con seguridad el silencio acompañaba toda respuesta. Sin ir más lejos en Cruz del Eje los otros candidatos a intendente ni idea tenían del Parque Solar que EPEC iba a construir para brindar energía a esta región en el 2023, todavía esperamos. 

Pero creo que no alcanza con echarle la culpa a los políticos. Tal vez debiésemos tener en cuenta nuestro papel en esta película de terror. O golpearnos el pecho y decir en voz alta: "Por mi culpa". Yo lo permití, yo no exigí, yo dejé que ocurriera. Porque me dio fiaca, porque me dieron un choripán, porque me dieron un bolsón, porque no dije nada por compromiso, porque soy aplaudidor serial de incapaces y corruptos, o por una cosa, coso, o por la otra. 

Nunca —parece—, miramos más allá de nuestra vereda. Y hasta creo, que las cámaras de diputados y senadores funcionan gracias al ejército de asesores. 

Mire si les vamos a pedir o exigir inversiones.




ENRIQUE URQUIJO Y LOS PROBLEMAS: "Se fuerza la máquina"


(diceelwalter.blogspot.com)


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