Ciego del sello dulce en las bocas
deshielando recién su corpiño entrelazado
par
ciegos y par
estallido fuimos a ser entre las sábanas
saliendo algo pasó temblando su bruma su huidizo
sexo por nosotros
y llegamos al mar al final del mar
de fulgir el cuero aleccionado contra el mundo
silenciotendidos
creímos ver una gran lágrima que nos tragaba
por pródigos y dimos en acuerdo el nos
porque entonces ya no seguíamos a nada ni a nadie
queríamos devueltas las preguntas
y aquello era pura pasión
puro aún
honrados decidimos descorchar las pocas botellas
que trajimos para beber
por la suerte de los diluvios y las de historias
que se escucharían hasta entrada la noche en los boliches
del sur y hasta nos dijimos diluvio un poco (había querido orinar
sobre los fascinantes monumentos
lejos crujían otros días te dije quizás más hermosamente
-cambiémonos- agarramos maletas y todo) en eso acordándonos
del tú y yo sacando el caído mármol de las faldas
de los cafés de Berlín y sus hermosas y tristes mujeres
amados vencidos dimos a la ganancia dos orquídeas
y todo parecía ser como en la niñez armados de
juego y orquídeas para los muertos juego y rosas
para los enamorados risas sin risas y mirar el cielo por pastos
y tú agarraste el chal que tu abuela te había tejido
aún en el regazo arrullaste entero el firmamento era un canto
encendido lo arrullaste entre los senos llegando casi a las aguas
destapados de blancos
y lo soltaste para que volara y como la vida repitiéndonos
el morir la belleza y su resurrección fuimos
por otro diafragma a morir
dormir tal entonces vez soñar
largo viendo en ello creí decirte algo así como la alegría.
(para Ina Jennerjahn)
COMO UNA ORACIÓN EL ALBA
esta como agua vertical, este filo de piedra pura
a bolsillos llenos; un golpe de tu dedo sobre
las sombras de los libres, el trágico desvelo allá
abajo en la hora bella en que fui otro.
este instante a tus dolores y tus amores descarnados,
tus pasos de alma a alma.
el aire y el mundo no buscados.
la vida más terrible y hermosa, la primera aventura
dónde se lanzan las noches, los jadeos de
sufrimiento y placer -detrás de las fachadas
de los palacios-, y los pálidos destellos de los
ojos.
cuando todo quede reducido a una estrella,
a una única estrella mendiga
tibia y viviente con un día dentro
la transfiguración agazapada profunda ardiente
sobre las silenciosas tejas
el torbellino de las formas los labios
el reposo sobre el lecho o sobre el prado
la viga maestra los muros
investiremos las ciudades las nuestras
sólo el mar y el fuego mezclados
emergiéndonos uno a uno los velos
de Arcosanto
Pedro Antonio Araya
Nació en Valdivia, Chile, en 1969.
Estudios de Ingeniería Civil Electrónica en la Universidad Técnica Federico Santa María, de Valparaíso. Participó en el taller literario de dicha universidad y en el taller de poesía de la Corporación Cultural de Valdivia/ SECH. De esa formación es resultado lapublicación Palabra inaugural (Barba de Palo, Valdivia, 1991). Ese mismo año obtiene el Premio Gabriela Mistral, que otorga la Ilustre Municipalidad de Santiago. En 1992 publica el libro de poemas Arcosanto (Barba de Palo). Entre 1994 y 1996 vivió en Berlín. Cuenta con un libro inédito, titulado Ícaro pernocto.
Fuente:www.uchile.cl
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