Atardecer como un centro de luz que se encuentra
al final de la arena dorada. Hacia el imponente
atardecer surge una mancha especialmente
dirigida hacia su mirada. Se encuentra lejos de establecer un
diálogo mas si se concentra podría entender su susurro. El mar
apenas se agita y su centro de vida es solo su carne apenas
emprendida con algunas cicatrices del pasado y aun así, listas
para recordar todo aquello que ama y que existe. El son del
oleaje apenas perceptible, se ha impuesto ante todo lo que lo
rodea y solo algunos pequeños alados amigos, se acercan solo
para corroborar su existencial quietud. Su mirada apenas se
observa y así su pequeño cuerpo aún existe sin inmutar al
transeúnte.
Suele ser un pequeño grupo de personas que están
buscando algunos moluscos necesarios para su colección o tal
vez para su más tarde cena, ligera para poder escudriñar en la
lujuria, suficiente para aguantar el galope de la reproducción.
Están todos alrededor de un fuego latente y sin percepción de
ningún visitante. La compañía es suficiente y aquel enrejado de
brazos solo es comparado con los cantos de los ausentes en la
visión del atardecer.
Desde allá
Las torpes sonatas cubiertas de algún licor expuesto al sol
han de producir cantos sin sentido y hasta algunas rimas que
suelen acompañar alguna inspiración revuelta de embriaguez.
Sus brazos son nudos entre ellos y no se puede distinguir
cuántos jóvenes están ante el volcán de leña que, como
supernova, solo los envuelve sin dejar que escapen a su
libertad. Más allá algún iluso solo esconde su timidez bajo la
guardia de la indiferencia. Pobre incauto que será envuelto por
la ironía y al fin ser presa de la más bella de las princesas. El
fuego se atiza, la arena fría por la noche es solo parte del
entorno juvenil y aun así, aquel no se ha despertado y su
ausencia innata no es notada.
Alguien por las cercanías entona un pequeño grito de
exclamación que se ahoga entre la espuma del oleaje y de los
vasos de reciclable valor. Sin embargo aun así, un pequeño
grupo de cangrejos son el escenario de un pequeño festín de
tal vez inexplicable suceso. Solo acuso de que algo suele estar
en sí mismo sin despertar pero más allá de las críticas, aun
está ahí.
Desde adentro
Pequeño el zumbido de un ángel que se acerca y una
pequeña luz que no se puede explicar. Su aparición solo es
parte de todo el escenario tártrico y evolutivo. Demasiada
sabiduría y aun así tan simple su situación. Su pequeño cuerpo
aún está sin mutilar y su esencia sin corromper. Su pequeña
densidad solo lo acostumbró a sentir cuando aquellos días de
tanta convulsión le hicieron pensar sobre la eternidad.
Religiones y santos especialmente diseñados para expiar la
culpa, cosas que solo nosotros los seres humanos
entendemos. Porque entender algo tan sencillo si es tan simple
que lo complicado es pensar en lo difícil que es entender lo
claro que significa. Amor por doquier, dulzura de sonrisa que
expresa aquella luz que se acerca. Noble sensación de estorbo
ante lo grandioso y excelso. De donde es aquella luz
promiscua, llena de tanta belleza y sabiduría que tanto me
asombra.
Eres aquel que estuvo allí cuando te necesité y culpé al
universo por tu ausencia. Ahora vienes por mí sin excusa solo
para encontrarte conmigo. Bien lejos de mis sentimientos estás,
más lejos aún de mis necesidades y osas aparecer sin
particular búsqueda solo para encarar tu llamado. Osas
perturbar mi tranquilidad y estar conmigo para llevar alegría a
tu creador. Osas permitir estar conmigo cuando hace un tiempo
solo quería tu compañía y ahora solo te atreves a venir sin
aviso.¿Dónde estabas cuando te necesité?
RESPUESTA:
Hola, sin nombre, estoy porque solo te tengo a ti y a ti es
que deseo llevar tu alegría. Solo un hombre como tú es apenas
necesario para encarnar belleza y amor.
Tú solo estabas donde
yo estuve y solo estoy donde tú estuviste. Porque la pregunta y
las dudas si cuando preguntaste siempre escuché y para
responder solo terminé las frases que respirabas.
Todos
Hey, vengan acá. Es esto lo que parece o solo es uno de
nosotros jugando una broma pesada.
¡No! Es solo un anciano.
Pobre, murió solo. ¿Quién sería?
No sé, pero vean su sonrisa.
© Jorge Costa.
Jorge Alberto Costa Padilla Fecha de nacimiento:29-octubre-1966 Caracas, Venezuela. Email jorgecosta292004@yahoo.com - jorgecosta29 (Skype)
Ocupación Actual: Arquitecto,Corredor Bienes Raices,Escritor,Empresario. Entretenimiento: Cine de Ciencia Ficcion y Autobiografias, Animacion, Leer. Busqueda: El bien en los demas donde solo reside su semilla y has de encontrar el agua necesaria para mantenerla viva y al alcance. Deseo: Realizarme a plenitud. Donde estoy: aqui, y donde pueda ser feliz. Meta: Reunir al mundo bajo un solo nombre.
Finalidad: Byhuk.com - www.amazon.com
Fuente: Anaquel Literario
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