IBARRECHEA: LA SEÑORA GUILLERMINA, HACE SU TAREA

La señora Guillermina viene siempre puntual y hace su tarea, como todos los martes y sábados de diez a catorce horas.

Si estoy en casa, me dice que va a empezar a acomodar y limpiar mis cosas empezando por el baño, luego sigue por el dormitorio, prepara unos mates y me ceba algunos amargos, como me gustan. Sino, ella entra sola y viene siempre puntual a hacer su tarea.

La señora Guillermina lleva finalmente mi ropa al lavadero, y deja el departamento donde vivo, impecable cuando se va.

Hablamos seguido con la señora Guillermina, mientras ella hace su tarea. Como yo, cree que tenemos unos legisladores que solo trabajan para meternos la mano en los bolsillos y sacarnos todo el dinero posible.

"Mire don Ibarrechea, el gobierno, los legisladores, nuestros representantes, esos caraduras que uno vota porque tiene la obligación de ir a votar, vengan a decirnos que en sus bolsillos no tienen plata robada del pueblo, es porque tienen ropa nueva, recién comprada. Usted vio como inventan reglamentaciones, normativas, leyes y esas cosas que solo sirven para fabricar multas que los inspectores de distintas áreas se encargarán de aplicarnos. Está clarito, total ese dinero engrosará sus aumentos salariales también, ellos lo saben. Así es y  fíjese don Ibarrechea, sino en lo que hacen esos sinvergüenzas de la policía caminera que le cobran una multa escandalosa porque a usted en plena ruta se le quema una lámpara de la luz del auto, lo paran, le hacen la multa y lo dejan seguir con la misma infracción... Ay Dios santísimo, es de no creer. Total ellos ya recaudaron, se aseguran el sueldo y se aseguran el aguinaldo y una tiene que seguir burreando. Ah, mientras tanto las rutas siguen en peor estado que antes y el bache lleno de agua que quemó la lámpara del auto es cada vez más grande. Y para colmo, si usted no se paró en una estación de servicio a reponerla, mire pero qué casualidad, ellos estarán esperándolo nuevamente, dos kilómetros más adelante. Que si construye, permiso para esto, permiso para esto otro, tasa municipal, tasa provincial."

A veces, la señora Guillermina me pregunta si quiere que ella me cocine mientras hace su tarea de acomodar y limpiar mi desorden.

"Sube el precio del boleto del transporte público como si nada, y todos los usuarios protestamos, menos los mismos choferes porque, como usted sabe don Ibarrechea, ellos se llevan un diezmo a sus haberes porque así está estipulado. Otros caraduras que se amparan no se en qué cosa creyéndose los dueños de las unidades que les da de comer para amargarnos la existencia con estúpidos paros sorpresivos."

La señora Guillermina, me cocina unos fideos con ajo y perejil, riquísimos.

"Ni hablar con lo último que sacaron para seguir con este ritmo devorador a través de impuestos, don Ibarrechea. ¿Sabía usted que ahora no se puede fumar mientras conduce su automóvil?  No señor Ibarrechea. Ellos, metiéndose en nuestras vidas, nos prohíben fumar en nuestra propiedad privada, que es nuestro automóvil. ¿A usted le parece?Imagínese yo no fumo como usted, pero llevo siempre un chupetín en la boca, mire."

La señora Guillermina se lleva un dedo a la boca y me mira. La miro.

"¿No le parece que estuviese fumando? ¿Puede discutirle eso usted, al juez de faltas?Dicen en sus argumentos que fumar distrae, mientras uno conduce se distrae, señor Ibarrechea. Usted pone discos compactos en la compactera del auto, cambia la emisora de la radio, esquiva baches, los semáforos que no funcionan, el saltimbanqui que hace piruetas en la esquina, los peatones que cruzan a la mitad de la calle, que siempre hay alguien que lo llaman por el teléfono celular, que a veces hay que mirar por el espejo retrovisor para ver quién es el tarado que le está dando a la bocina, que se corre para otro carril en brusca maniobra para que pase una ambulancia de dudoso prestigio. ¿Acaso todo eso no distrae al conductor y acaso todo eso no puede causar más accidentes que ir fumando? Si los pulmones son míos. Ah, encima hay que tener cuidado con las fotomultas, usted va pensando mientras conduce, desde dónde carajo lo están filmando como si fuesen el Gran Hermano."

-Tiene razón Guillermina, todo es solo un acto recaudotorio, nada más.

"¿Usted cree que una multa salva vidas? Después dirán que masticar chicle distrae, que tomar mate distrae, rascarse una oreja distrae, decirles a los niños que se queden quietos allá atrás distrae, tomar una gaseosa distrae, conducir será un castigo, y sino fíjese en  esta otra, don Ibarrechea, andar por la calle fijándose dónde está escondido el inspector, también distrae. La hicieron bien, habrá siempre un diezmo para ellos, los tendrán con uniformes nuevos, radios nuevas, vehículos nuevos."

-Supongo que nadie quiere matar al cartero de las buenas noticias, Guillermina.

"Hablando de suponer, don Ibarrechea, yo calculo que se trata como el juego de los actos, primer acto; Entran los delegados de los gremios y dicen que los costos, que la inflación, que la canasta familiar, que los índices, y que el sueldo no alcanza. Piden aumento de sueldo. Segundo acto; Ellos le dicen que no hay plata, los convencen que no hagan paro ni manifestaciones ni nada de nada, que pronto buscarán una solución. Tercer acto; Los cráneos deducen que hay muchos vehículos ocupando espacio en las calles, entonces pintan los cordones de amarillo, ponen carteles de no estacionar por todos lados y sueltan a las fieras a hacer boletas de multas por millares. ¿Sabe como se llama esta obra?

-Tiren más ideas para robar legalmente.

"Exacto don Ibarrechea, así es que ellos salieron con eso del cigarrillo y acuérdese que ahora van por los anteojos para sol, el conductor que no lleva anteojos para sol, multa. Ah, y si llevan anteojos, algún funcionario coimero va a decir que los únicos anteojos autorizados son de tal marca, que deben ser así o asá."

-Ni hablar del sueldo que ellos mismos se ponen, total, es dinero del pueblo.

"Y dígame usted, señor Ibarrechea, dónde están los insumos para los hospitales, ¿eh? Y porqué ponen esas aulitas que son contenedores de chapa en las escuelas, y las famosas obras de desagote de las calles cada vez que llueve y eso de las cloacas ausentes y las otras tapadas y graciosamente, señor Ibarrechea, usted sabe que mi casa antes valía tantos pesos, según ellos, y que con mi trabajito aquí, y en otro departamento por la tarde, hice unas mejoras que ellos mismos consideran que por eso, la casa esta revaluada y yo, ahora debo pagar más, muchos más impuestos."

-El gobierno dice, yo no les creo nada, que te sacan plata a vos Guillermina, a mi y a todo el que trabaja para repartir en eso de la inclusión de los vagos y malandrines y en eso otro de los subsidios que nadie explica y que no está claro. 

"Ay, don José Antonio, si Poncio Pilato se lavó las manos, éstos tipos se dan un baño, así cualquiera gobierna. Así, cualquiera, todo el mundo es bueno con dinero ajeno. Pero no quiero hablar más de esto porque alguien va a decir que soy una gorila."

La señora Guillermina me dijo muchas cosas más, mientras tomamos un café.

Yo me preparo para salir a trabajar, mientras ella continúa lavando los platos. Por la radio pasan una canción, de aquellas de los años setenta. Dejo de usar mi computadora, le quito los elementos de limpieza de las manos enguantadas y la tomo de los brazos, la señora Guillermina se deja llevar y bailamos. Bailamos la canción entera.

No se porqué lo dejan tanto tiempo solo señor Ibarrechea, no se porqué -me dijo la señora Guillermina, mientras espero el ascensor, como un robot, y ella vuelve a sus tareas.

José Antonio Ibarrechea
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Tavares

"More than a woman"

"Tavares-More Than A Woman", grabación de sonido administrado por: 
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For entertainment purposes only.
Ensayo de baile de la película "Saturday Night Fever"
y extracto de la película "Cortocircuito"

Subido por: alewelfare

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